miércoles, 11 de marzo de 2009

DRAMATURGIA II

Taberna barrial, antiguedades en las paredes. Delia viste la misma ropa que esta tarde en el consultorio odontológico. Roberto, de unos 75 años, lleva puesta una camisa y el pelo engominado. Sobre la mesa, un ramo de flores baratas.

Roberto: ¡Ay Delia! Brindemos porque por fin nos damos esta oportunidad de ser felices juntos y de com...

Delia: Eh, Roberto...

Roberto: De compartir lo que queda de nuestras vidas. ¿Sabes cuanto espere este momento?

Delia: Si, yo quería...

Roberto: ¿Sabes las noches que me domí soñando con vos? Las tardes a los mates, imaginate, Delia, juntos... ¿Por qué esperamos tanto? ¿Por qué tuvimos tanto miedo?

Delia: Rober...

Roberto: Delia, me siento pleno. Por fin se están dando cosas buenas, que me llenan el corazón de felicidad. Estamos juntos, nos animamor, después de 20 años de vivir en cuartos vecinos... Quiero que tiremos abajo la pared que nos separa. Nada ni nadie va impedir que estemos juntos. Le voy a pedir ayuda a Omar, ¿te hablé de Omar?

Delia: ¿O... Omar?

Roberto: Mi amigo que conocí en mi viaje de estudios a Francia, un argentino que estaba viviendo allá. Pero nos reencontramos de casualidad la semana pasada, está de vuelta en Argentina ¿podés creer?. Enviudo pobre, seguro no va a tener problema en darme una mano con la pared. Además tiene un buen pasar, es odontólogo, imaginate Delia, no nos va a cobrar ni un solo peso.

El teléfono de Delia suena, ella no atiende.

Roberto: ¡Ay Delita! (Suspira) Vamos a llegar juntos a los 100, y vamos a hacer una fiesta en el salón de arriba, vamos a invitar a todos los vecinos, a las enfermeras, a todos...

Detrás de Roberto aparece Omar, la mira a Delia, ella lo reconoce y se incomoda, corre la mirada. El se acerca y ve a su amigo. Duda. Pero al instante se da media vuelta y se reetira del lugar. Esto sucede mientras Roberto sigue hablando.

Roberto: Podríamos invitar a la prensa, imaginate Delia: "Los viejos actores que apuestan al amor" (Risas) o... "La casa del teatro está de fiesta". Podemos vender los derechos de nuestra historia a la prensa y mirá si asi conseguimos trabajar! Ay Delia! Me devolvés la vida, me haces tan feliz.

(Pausa) El la observa

Delia: A mi... también Roberto. ¿Vamos a casa?

Roberto: Si! Vamos! Pero... ¿vamos a dormir juntos está noche?

Delia:¡Ay Roberto! ¿Cómo se te ocurre? Necesito pensar un poco, hablemos mañana.

Roberto: Lo que vos digas mi reina.

Roberto y Delia pagan juntos la cuenta. Se levantan, el la toma del brazo, y salen del lugar.

No hay comentarios: